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El Cinto, un santuario acogedor

Atrás quedaron las peregrinaciones y las misas multitudinarias. Es que, en tiempos de pandemia, es mejor evitar los riesgos. Sin embargo, la fe de los devotos a la Virgen del Cinto se mantiene; decenas de visitantes suben hasta su Santuario para darse una vueltita.

Si vas a Lloa o subes al Pichincha, debes pasar por El Cinto | Video: A. C.

“Es que en esta época que todo está difícil, es mejor mantenerse cobijados con el manto sagrado de nuestra madre”, sostiene María Eulalia, quien llega a la planicie de adoquín que hay detrás de la iglesia para orar por sus familiares y en especial por sus hijos, dos de los cinco están en el extranjero.

Si bien no se conoce como mismo apareció la Virgen en ese lugar, hay muchas leyendas relacionadas con ella. Una es la que menciona al Mariscal de Ayacucho; en su camino a la batalla del Pichincha, pasó por la cima de la loma de Huayrapungo (puerta del viento) y dejó su cinturón como ofrenda para que la Madre bendijera al ejército libertario.

Otra le atribuye milagros reproductivos. Hay personas que aseguran que luego de orar y pedir con devoción, lograron embarazarse contra todo pronóstico.

Peregrinación centenaria

Tampoco se sabe cuándo mismo inició la peregrinación, pero hay reportes desde hace más de cien años.

“Desde la última semana de agosto hasta la primera de octubre se celebra a la Virgen del Cinto. Menos el año pasado, que se suspendió por la pandemia y este año parece que será igual. Eso sí, junto con mi familia venimos a agradecer los milagros y todos los favores que la virgencita nos ha hecho”, comenta Juan Coello, habitante del suroriente de Quito.

Si bien no se sabe quién pintó a la Virgen del Cinto, algunos atribuyen la obra a Fray Pedro Bedón, de la Escuela Quiteña. El sacerdote falleció en 1621.

Más datos

  • De acuerdo a la tradición, ya son más de cien años que en septiembre se realizan las peregrinaciones masivas hasta el Santuario.
  • El Cinto está ubicado frente a la entrada del Parque Metropolitano Chilibulo – Huayrapungo.
  • Existen varios accesos al Santuario, el más conocido y con camino pavimentado es por La Mena Dos.
  • Hay una cicloruta desde el barrio La Dolorosa, al occidente del Hospital del Sur.
  • Desde el Santuario del Cinto, se puede observar a plenitud el centro poblado de Lloa y el Guagua Pichincha. Mientras que desde el Chilibulo – Huayrapungo, se ve el sur de la capital.
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