En los pueblitos, la magia del reencuentro se hace realidad
Disfrutar de espacios abiertos, respirar aire puro y compartir con los seres queridos, se hizo más necesario luego de que la pandemia nos obligó a confinarnos.
En la nueva normalidad tenemos la posibilidad de salir, con los cuidados necesarios y respetando los protocolos de salubridad, para interactuar con las personas del círculo más cercano, relajarnos y cambiar de ambiente.
Salir al parque, caminar o ir de paseo a un sitio cercano, al momento son las actividades preferidas por la familia.
En los últimos meses se ve que el incremento de visitantes a destinos cercanos. En el caso de Quito, las parroquias rurales se ven beneficiadas lo que ha motivado a que amplíen sus ofertas turísticas; sobre todo, lo hicieron aplicando normas de bioseguridad, la mismas que brindan una percepción de tranquilidad a propios y foráneos.
Una parroquia que tiene de todo
Uno de los destinos que más afluencia tiene Quito, la capital del Ecuador es Lloa, una población ubicada a 3100 metros sobre el nivel del mar. Es un valle andino a los pies del Guagua Pichincha (4784 msnm), un volcán activo de gran atractivo para los amantes del senderismo.
Además, cuenta con otros atractivos naturales como las cascadas de Palmira o Chirinchos; las Playas del río Cristal, el río Blanco, por nombrar algunos. Tiene también rutas para senderismo, ciclismo, motociclismo y 4×4.
Cómo llegar
En La Mena Dos, al sur de Quito, encontrarás la parada de los buses interparroquiales de color verde. Salen cada media hora, su trayecto hasta el centro poblado dura alrededor de 25 minutos. El costo del pasaje es de 50 centavos; el servicio se extiende desde las 06:00 hasta las 18:30.
También puedes contratar tours con paquetes todo incluido, que te ayudarán a vivir una aventura sin preocupaciones ni contratiempos. Existen varios operadores.