Gestores turísticos de la ruralidad intercambian experiencias

Un total de 56 gestores están en permanente capacitación gracias al proyecto impulsado por Quito Turismo para fortalecer la actividad turística en las parroquias rurales.

Dentro de las estrategias para motivar una mayor estadía de los visitantes en Quito, está el impulsar el turismo rural. Para cumplir con las metas, se diseñaron varias actividades, entre ellas el capacitar a los gestores turísticos de la ruralidad, al momento hay 56.

A más de recibir una capacitación de alto nivel con el respaldo de la Universidad Andina Simón Bolívar, los gestores visitan experiencias turísticas exitosas, intercambian ideas, dan valor a sus productos y aprenden estrategias para lograr una mejora competitiva. Estas actividades enriquecedoras les permiten un mejor entendimiento del turismo, genera propuestas de valor y les impulsa a diseñar paquetes, productos y servicios que además sirven para generar ingresos familiares, crear fuentes de empleo y dinamizar la economía de las parroquias rurales del Distrito Metropolitano de Quito.

Este proceso, que es promovido por Quito Turismo, ya presenta resultados positivos en Pacto, Perucho, Lloa, Calacalí, Puéllaro, entre otras parroquias.

También ha motivado a generar una red de turismo comunitario que incluye programas como el Paso a Paso y el intercambio de experiencias entre los emprendedores turísticos de la ruralidad. Además motiva a los negocios a regularizarse e incluir sus marcar, servicios o productos en el Catastro Turístico, que conlleva beneficios y permite acceder a una mayor cantidad de turistas nacionales y extranjeros.

Hasta el momento, los gestores que fueron capacitados durante dos meses en la Universidad Andina, han aprendido de las experiencias y modelos asociativos como el implementado en Yunguilla; también de proyectos exitosos como los que llevan adelante las comunidades y emprendedores de Puéllaro y Perucho, en la Ruta Escondida; además aprendieron a generar propuestas de valor en la Hacienda el Molino, en Ayora, que es parte de la Ruta Marianita de Jesús. La empresa privada se ha sumado a esta iniciativa. En el Mashpi Lodge, los gestores aprendieron sobre el proyecto turístico ambiental, que es uno de los más importantes del continente.