Pastaza, el corazón de la Amazonia

Por su extensión, es la provincia más grande del país. Su territorio supera los 29 500 kilómetros cuadrados. Paradójicamente, es la segunda menos poblada de Ecuador, detrás de Galápagos.

Cuando pensamos en la región oriental, nuestra mente inmediatamente la asocia con selva y bichos; sin embargo, la actividad turística en esa zona está consolidándose y existen ofertas que son apetecidas por miles de personas de todo el mundo.

Dentro de esa variedad, Pastaza es la provincia que más desarrollada tiene la industria turística. En su abanico de posibilidades están los diques y sus balnearios, paseo de los monos, orquideario, parque etno botánico, paseo etno arqueológico, espacios para deportes de aventura, senderismo, ríos, paseos fluviales, visita a comunidades originarias, parque acuático y muchos más atractivos que garantizarán días de descubrimiento y relax.

Su capital, punto de partida.

Cuando uno camina por el Puyo, capital de Pastaza, es muy frecuente ver a decenas de extranjeros, quienes con su mochila al hombro, pantalones cortos y cámara de fotos van de un lugar a otro, disfrutando de uno de los espacios más biodiversos del planeta.

Esta ciudad, particularmente, tiene un importante movimiento económico gracias al turismo. Es el punto de partida de los tours fluviales, además de su malecón, rutas ecológicas y otros atractivos. Cuenta también con restaurantes, bares y discotecas que son un deleite para los turistas de todas las edades.

Así que ya sabe, para la siguiente que le hablen del Oriente y de Pastaza, en particular, recuerde que esta zona es de las más bonita que va a conocer en su vida, gracias a la cantidad de destinos y actividades que encontrará. Además, conocer la selva, es un privilegio.

En auto, desde el parque La Carolina en Quito, hasta el terminal terrestre en el Puyo, el recorrido puede demorar cuatro horas.